A sólo unos 25 km de la capital de la provincia, en medio de las yungas tucumana, y a los pies del Cristo Bendiciente, se encuentra uno de los paraísos naturales de Tucumán: El cerro San Javier.
En este intento de hacer un rápido repaso de todas las cosas que Tucumán tiene para mostrar, una de las que me faltaba era citar algunos de los maravillosos paisajes naturales que pueden verse en la provincia. El cerro San Javier es uno de mis favoritos, ya que su cercanía a la capital permite que organizar un viajecito al cerro para pasar el día sea muy económico, aunque también existen muchos servicios para turistas y un importante hotel.
Es un lugar excelente para reunirse a tomar mates un domingo de verano, ya que por su altura, también es un refugio para los días calurosos. También es el lugar favorito de muchos deportistas, que diariamente suben al cerro a bicicleta o a píe aprovechando las agradables condiciones del lugar.
El Cristo Bendicente, quizás la escultura más famosa de la provincia y que forma parte de la cabecera de este blog, ubicada en el cerro puede apreciarse desde la ciudad capital de la provincia por su gran tamaño (unos 28 metros de altura según la wikipedia).
Si quieren pasar un buen rato, rodeados de la naturaleza, en un ambiente de agradable tranquilidad, rodeados de la vegetación típica de la región y paisajes espectaculares, seguramente una visita al cerro San Javier va a ser lo que necesitan.
Dejo algunas fotos más:
Acá estoy yo a los pies del famoso Cristo Bendicente:
Esta es la ciudad de San Miguel de Tucumán vista desde el cerro:
El cerro San Javier
Publicado por
Sergio
sábado, 20 de junio de 2009
Etiquetas: Cerro , San Javier , Tucumán , Turismo
2 comentarios:
mi provincia ♥
la quiero
jjajjaajajajajajajjajajajjajajajajajajajjajajajajajaj
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